
Interviene en el espacio, como en la Poesía, la idea de unidad fundamental no es la palabra sino la frase. De manera que lo importante es que la realidad no es una sola fotografía, sino el conjunto en una relación particular entre sí. Fragmentos que tienen sentido en su relación entre sí.
La exposición, con estructura de enigma, incluye una selección de objetos
y de lugares: todo adquiere valor a través de los lugares visitados y que,
ahora, narran en el regreso a Ítaca.
Ficha técnica:
Exposición fotográfica
“ÉRASE UNA VEZ EN ITHACA”
Charo Guarino
Cafetería ‘Ítaca’ (Murcia)
Del 2 al 15 de octubre
La artista polifacética —como la definieron en el recital de la
cafetería ‘Ítaca’—, y sugestiva y singular persona, Charo Guarino ha vivido muchas
Ítacas, desde la patria de Ulises hasta esta que muestra en fotografías, situada
en el estado de Nueva York.
La mirada es sobre todo,
poeta de la compleja sencillez. Y lo proyecta situándose detrás de la cámara
pero el sentimiento en el lugar que mira.
Su obra fotográfica ha ido alternando la estética de composiciones elaboradas
y poéticas con el camino siempre arriesgado del retrato. 

Ella misma señala los motivos, en el folleto de la exposición y la dedicatoria.
Charo
Guarino indaga, a través del objetivo, en las señales
de los sentimientos.

Y sigue emocionando hoy cuando vuelve a ver estas imágenes y recuerda a sus protagonistas.
La muestra
recoge una selección de 19 imágenes,
donde la fuerza de su trabajo reside en la yuxtaposición.
Sus temas
sobre la conciencia de la energía, obtenida y proyectada en diferentes espacios,
descubre el grado de intimidad y confianza que logra con sus fotografías.
La luz y la sombra son muy importantes porque destacan la condición dimensional de la obra, al mismo tiempo que refleja el espíritu de la autora. Además, ha pensado con cuidado el encuadre, porque en ese rectángulo construye la belleza: es la esencia de la fotografía.
Charo Guarino da pistas de lo que es una
constante en todo su trabajo: su profundo
humanismo, su compromiso ético, el respeto con el que trata lo que mira, ve y observa.
El
juego de imágenes
es el del poema, a la vez que relato y narraciones visuales con significados de
la misma realidad.
La
fotógrafa parece que mira desde afuera, (creo que es una especie de juego
interior-exterior) con la iluminación muy centrada.
Antes
de disponer el escenario, se asegura de que va a salir bien. Es un trabajo que
requiere de mucha preparación.
La experimentación es inherente
al artista y nunca termina.
Son fotografías que parecen
fotografías, no dan lugar a confusión. Esta exposición pretende, entre otros
objetivos que hay que descubrir viéndola en directo, insinuar al espectador momentos
abiertos, instantes concretos de la intimidad donde todo es normal.
La
iluminación ayuda, y Charo Guarino utiliza un juego de luces y de sombras que
generan una atmósfera que atrapa al espectador, con la sensación de que algo
sucede, un diálogo entre la obra y el espectador, alrededor del universo
íntimo. Las imágenes son captadas desde el interior del pensamiento, un arte de
contenido.
Es una exposición de tesis, centrada en la
fotografía donde se relacionan la ciudad y la Naturaleza, y que sirve para
formular la pregunta: ¿Cómo mediamos los lugares con aquello que las imágenes
representan?
Nota.- Algunas de las fotos que he realizado para la
crónica de la exposición son de baja calidad. No hacen justicia a la excelencia
de la exposición.
Hay
que ir a verla, directamente.
(Volveré a Ítaca).
Una maravilla de persona Charo Guarinos.
ResponderEliminarPoesía y fotografía siempre se han llevado bien. Constituyen el reino de la sugerencia. Como lo son las fotos con las que acompañas tu crónica. No de baja calidad, como las autodefines, sino incitadoras a visitar la exposición real. Como lo son tus palabras sobre ella. Y si, además, la autora es una maravilla de persona, como insinúa mi predecesor, pues motivo de más para ir a verla.
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